iiarquitectos: Corazón de manzana

Conformado por doce ateliers/viviendas, el edificio Corazón de manzana, del arquitecto Pablo Dellatorre, se ubica en el Barrio Güemes, en la ciudad de Córdoba.

Emplazado en el centro de la manzana, el acceso principal se da a través de un patio central, hacia el cual balconean las terrazas de cada unidad. Poblado por una importante vegetación, este espacio está dividido en dos por una caja de vidrio semi traslúcida que contiene las escaleras, plegadas en chapa antideslizante, que conducen a las viviendas.

El paso entre interior y exterior en cada unidad se resuelve mediante aberturas de madera de pia a techo, generando transiciones fluidas, siempre buscando crear una sensación de vivienda en comunidad entre los ocupantes, entre los cuales se encuentran arquitectos, diseñadores, fotógrafos, músicos y publicistas.

El edificio fue resuelto a partir de una estructura de hormigón armado. Las losas, vigas y columnas se dejaron en hormigón visto, lo que le otorga cierto aire rústico al conjunto. El resto de las piezas constructivas, tales como las aberturas, los componentes de las envolventes y barandas, se materializaron usando elementos secos y livianos. También se realizó una estructura metálica para las terrazas privadas y las circulaciones comunes, revestidas en madera de eucaliptus grandis.

La composición de la fachada interna resultó vital para el autor, siendo que es la cara con la que los usuarios se encuentran todos los días. Una envolvente de madera de guayubira revista la totalidad de los tres pisos de altura del edificio, ofreciendo distintas alternativas de privacidad e iluminación para las distintas aberturas. Por las noches, la luz de las viviendas se filtra a través de los paneles, lo cual le da un carácter más vital al patio central.

En la terraza se ubica la pileta, la huerta y un espacio de reunión con bar y parrilla, llamado GRONcho, construido con los puntales, las tablas y los restos del fenólico que sobrevivieron a las hormigonadas.