En la unión entre el centro histórico de Vic y un gran espacio verde de terreno natural en la ribera del río Méder, previo a las zonas de ensanche, Josep Llinàs construye un centro cultural con un amplio y complejo programa que hace del edificio un referente a nivel urbano y comarcal.
Entre la densidad de la trama histórica y la gran escala del territorio, el proyecto asume su condición de límite entre arquitectura y paisaje.
La actuación se ubica en un solar situado entre el centro histórico de Vic y el área de los futuros ensanches. El edificio asume y reproduce la densidad de la trama de la ciudad antigua con la que se relaciona directamente; se hace eco de la gran escala y la relación con el paisaje, a través de la apertura hacia el amplio espacio verde orientado al sur.
Destaca su diseño en forma de espiral y su espectacular juego de volúmenes dorados y cubiertas inclinadas de zinc. El teatro tiene una capacidad para 800 personas con un espacio escénico útil de 168 m2 y una caja escénica de 20 m de altura, que alberga una concha acústica modulable.
El auditorio cuenta con un aforo para más de 380 personas con un escenario de tres plataformas automatizadas y gradas retráctiles. La escuela de música dispone de 49 aulas y 7 estudios, con una sala para audiciones con capacidad para 100 personas. También se ha construido un foyer interior con la cafetería y otro exterior preparado para actividades al aire libre. Estos espacios se han dotado de las más avanzadas tecnologías en sistemas de iluminación y audiovisuales.
Al ser este edificio un que alberga un programa relacionado con la música, es una obligación poner especial atención en los asuntos del control acústico.
En el aula de música se utilizaron losas flotantes, falsos techos aislantes y trasdosados autoportantes de placa de yeso laminar en paredes. Cada una de las aulas de la escuela de música funciona como una caja aislada.
El cerramiento de las aulas de la escuela de música es doble, consiguiendo el máximo aislamiento acústico. Los huecos se componen de un doble acristalamiento, siendo fijo el exterior y practicable el interior.
Entre la densidad de la trama histórica y la gran escala del territorio, el proyecto asume su condición de límite entre arquitectura y paisaje.
La actuación se ubica en un solar situado entre el centro histórico de Vic y el área de los futuros ensanches. El edificio asume y reproduce la densidad de la trama de la ciudad antigua con la que se relaciona directamente; se hace eco de la gran escala y la relación con el paisaje, a través de la apertura hacia el amplio espacio verde orientado al sur.
Destaca su diseño en forma de espiral y su espectacular juego de volúmenes dorados y cubiertas inclinadas de zinc. El teatro tiene una capacidad para 800 personas con un espacio escénico útil de 168 m2 y una caja escénica de 20 m de altura, que alberga una concha acústica modulable.
El auditorio cuenta con un aforo para más de 380 personas con un escenario de tres plataformas automatizadas y gradas retráctiles. La escuela de música dispone de 49 aulas y 7 estudios, con una sala para audiciones con capacidad para 100 personas. También se ha construido un foyer interior con la cafetería y otro exterior preparado para actividades al aire libre. Estos espacios se han dotado de las más avanzadas tecnologías en sistemas de iluminación y audiovisuales.
Al ser este edificio un que alberga un programa relacionado con la música, es una obligación poner especial atención en los asuntos del control acústico.
En el aula de música se utilizaron losas flotantes, falsos techos aislantes y trasdosados autoportantes de placa de yeso laminar en paredes. Cada una de las aulas de la escuela de música funciona como una caja aislada.
El cerramiento de las aulas de la escuela de música es doble, consiguiendo el máximo aislamiento acústico. Los huecos se componen de un doble acristalamiento, siendo fijo el exterior y practicable el interior.
Por iiarquitectos y arq.com.mx
0 comments:
Publicar un comentario