Los arquitectos del estudio Elding Oscarson edificaron en la localidad costera sueca Mölle esta casa con una planta superior recubierta por una fachada de tablones de abeto Douglas y una inferior completamente abierta al exterior mediante cristaleras corridas.
Al hacerlo así, los arquitectos han querido recuperar el espíritu experimental que existía antiguamente en el pueblo. Aquella experimentación se ha sustituido por un afán reservado de los edificios. No hay innovación.
Con gran ojo, este estudio ha querido unir ambas corrientes, estableciendo un guiño con la arquitectura rupturista del pasado a través de los materiales y aportando el corte rupturista en dos de la casa como legado propio.
Por iiarquitectos y arq.com.mx
0 comments:
Publicar un comentario