La Universidad de las Américas en Puebla recibe 8.000 estudiantes al año que están constantemente en busca de alojamiento. Cholula está viendo cada vez más desarrollos que se adaptan a la creciente población estudiantil.
En este contexto, BUNKER Arquitectura ha diseñado una propuesta para un complejo de 41 viviendas estudiantiles en un barrio residencial en Cholula. El programa de una residencia de estudiantes se caracteriza por ser una aglomeración densa de células con áreas comunes que absorben la vida social de los estudiantes.
Esto se complementa con una serie de espacios y programas que apoyan al programa principal. ¿Cómo insertar un denso complejo residencial de estudiantes en un barrio tradicional, sin afectar adversamente el carácter pacífico del sitio? El tema principal de la solución de este diseño era por lo tanto, la necesidad de un edificio encerrado en sí mismo que no interfiera con la vecindad local, pero que sin embargo permitiría una escena de intensa vida social en su corazón.
El esquema resultante dispone de un patio central rodeado de tres niveles. Cada celda de la vivienda en este anillo incluye todas las comodidades necesarias para una residencia compacta: alojamiento para dormir, estudiar, una cocina básica y baño completo. La planta baja incluye área comercial rentable, una cafetería y un salón privado.
Desde el exterior, esta masa parece cerrada y privada, vestida con una piel única, sin interrupción de la placa perforada. Sin embargo, este bloque privado levanta una de sus esquinas para permitir el acceso directo al patio a nivel del suelo. Todo el edificio debe ser entendido como un claustro, con un enfoque hacia la privacidad y la vida interior, pero que también está abierto por este gesto. Un edificio que está cerrado, pero que a la vez resulta acogedor. Privado, pero a la vez completamente público al interior.
En este contexto, BUNKER Arquitectura ha diseñado una propuesta para un complejo de 41 viviendas estudiantiles en un barrio residencial en Cholula. El programa de una residencia de estudiantes se caracteriza por ser una aglomeración densa de células con áreas comunes que absorben la vida social de los estudiantes.
Esto se complementa con una serie de espacios y programas que apoyan al programa principal. ¿Cómo insertar un denso complejo residencial de estudiantes en un barrio tradicional, sin afectar adversamente el carácter pacífico del sitio? El tema principal de la solución de este diseño era por lo tanto, la necesidad de un edificio encerrado en sí mismo que no interfiera con la vecindad local, pero que sin embargo permitiría una escena de intensa vida social en su corazón.
El esquema resultante dispone de un patio central rodeado de tres niveles. Cada celda de la vivienda en este anillo incluye todas las comodidades necesarias para una residencia compacta: alojamiento para dormir, estudiar, una cocina básica y baño completo. La planta baja incluye área comercial rentable, una cafetería y un salón privado.
Desde el exterior, esta masa parece cerrada y privada, vestida con una piel única, sin interrupción de la placa perforada. Sin embargo, este bloque privado levanta una de sus esquinas para permitir el acceso directo al patio a nivel del suelo. Todo el edificio debe ser entendido como un claustro, con un enfoque hacia la privacidad y la vida interior, pero que también está abierto por este gesto. Un edificio que está cerrado, pero que a la vez resulta acogedor. Privado, pero a la vez completamente público al interior.
Por iiarquitectos y arq.com.mx
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