En Antofagasta-Chile donde se encontraba una refinería de plata y donde están las Ruinas de Huanchaca, fue el lugar escogido para emplazarse un nuevo Museo a través de un concurso nacional de arquitectura y desarrollo urbano del monumento y su entorno a éste.
El concurso que fue ganado por Coz, Polidura y Volante Arquitectos, tuvo como finalidad el consolidar el lugar como patrimonio cultural y de infraestructura, integrándose a la vez a la ciudad que se desarrollaba cada vez más hacia el sur y proporcionar una zona nueva para futuros desarrollos urbanos o nueva infraestructura.
A partir de esta propuesta se desarrolla y continúa la Av. Angamos hasta La Negra, delimitando así una zona de protección para las Ruinas y una nueva conexión Norte-Sur para la ciudad. El Museo es temático y el más importante al norte del país, cuenta con un anfiteatro al aire libre, en la que ambos se incorporan a las Ruinas, a las cuales se les da limpieza e iluminación, así como el mejoramiento en las explanadas de su base.
La cubierta del museo es transitable, encontrándose casi a nivel de la Av. Argentina, lo que otorga una mejor apreciación de las Ruinas o del mar, ya que la forma del museo no compite con su entorno o su topografía, se incorpora a esta conectando dos planicies de diferentes niveles formando una especie de talud de tierra con la estructura del Museo.
El edificio maneja una serie de patios que resuelven el problema climático (el sol del norte y el clima árido) e introducen luz natural y proporcionan vistas parciales al exterior; la geometría del lugar se origina desde las Ruinas, tanto en sus macizos como en sus vanos y las 5 salas rampantes reflejan una continuidad de las torretas ubicadas en medio de la ruina.
El concurso que fue ganado por Coz, Polidura y Volante Arquitectos, tuvo como finalidad el consolidar el lugar como patrimonio cultural y de infraestructura, integrándose a la vez a la ciudad que se desarrollaba cada vez más hacia el sur y proporcionar una zona nueva para futuros desarrollos urbanos o nueva infraestructura.
A partir de esta propuesta se desarrolla y continúa la Av. Angamos hasta La Negra, delimitando así una zona de protección para las Ruinas y una nueva conexión Norte-Sur para la ciudad. El Museo es temático y el más importante al norte del país, cuenta con un anfiteatro al aire libre, en la que ambos se incorporan a las Ruinas, a las cuales se les da limpieza e iluminación, así como el mejoramiento en las explanadas de su base.
La cubierta del museo es transitable, encontrándose casi a nivel de la Av. Argentina, lo que otorga una mejor apreciación de las Ruinas o del mar, ya que la forma del museo no compite con su entorno o su topografía, se incorpora a esta conectando dos planicies de diferentes niveles formando una especie de talud de tierra con la estructura del Museo.
El edificio maneja una serie de patios que resuelven el problema climático (el sol del norte y el clima árido) e introducen luz natural y proporcionan vistas parciales al exterior; la geometría del lugar se origina desde las Ruinas, tanto en sus macizos como en sus vanos y las 5 salas rampantes reflejan una continuidad de las torretas ubicadas en medio de la ruina.
Por iiarquitectos y arq.com.mx
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